lunes, 3 de noviembre de 2014

Dia de los difuntos


Emely Arguello
2-B
Arquitectura

2 DE NOVIEMBRE UNA CELEBRACIÓN CON CULTURA

La cultura es algo ancestral que aunque para muchos crean que es algo absurdo y vergonzoso, en algunas provincias del Ecuador, creen lo contrario. Estas comunidades desde la antigüedad tren estas costumbres de recordar a sus seres queridos que ya partieron, compartiendo con ellos un momento a meno. En la actualidad se sigue practicando esto, y que critica tiene la sociedad ante esto.

El Día de los Difuntos o Día de los Muertos es una celebración de origen prehispánico que honra a los difuntos el 2 de noviembre, comienza el 1 de noviembre, y coincide con las celebraciones católicas de Día de los Fieles Difuntos y Todos los Santos. Es una festividad que se inició en México y se extendió luego a Centro y Sudamérica; se celebra también en muchas comunidades de Estados Unidos, donde existe una gran población mexicana y centroamericana.

El Día de los Difuntos en el Ecuador se conmemora con una amalgama de tradiciones de las culturas aborígenes y ritos católicos que varían en cada una de las provincias: personajes, vigilias, oraciones y una diversidad de platos típicos de estas fechas forman parte de esta celebración.

Las vigilias en los cementerios marcan las noches y madrugadas del 1 y 2 de noviembre en muchos poblados, sobre todo en el sector rural del país.

Costumbres indígenas que incluyen ritos, oraciones y la colocación de ofrendas florales e incluso alimentos en honor a los que ya partieron todavía se realizan en comunidades autóctonas del Ecuador.

Misas, vigilias y la colocación de arreglos florales en las tumbas de los cementerios son las actividades que más se realizan en el país.

La comida también forma parte importante de la celebración. Las tradicionales Guaguas de pan, colada morada y una diversidad de platos se sirven el 1 y 2 de noviembre, y es una fusión de ingredientes locales (mortiño, ishpingo, etc.) con ingredientes llegados desde Europa (trigo).

Casamientos efectuados en honor a sus muertos en la provincia de Pastaza o  la colocación de tarjetas en las tumbas de Manabí, son costumbres que se cumplen cada 2 de noviembre por el Día de los Difuntos en el país.

Según algunos historiadores, los primeros pueblos indígenas del Ecuador ya celebraban el culto a los muertos como un homenaje a lo que ellos hicieron en vida y el legado que dejaron. Con la llegada de los españoles y del cristianismo, la tradición se adaptó al calendario católico y adquirió un nuevo significado: el de pedir por las almas de los muertos.

En el Ecuador podemos observar varios grupos de indígenas que aún conservan esta tradición religiosa, en el día de los difuntos. Desde muy tempranas horas los miembros de estos grupos, van conjuntamente con sus familia a los cementerios, junto a la tradicional colada morada y las guaguas de pan, en algunos grupos se conserva la tradición de ir a preparar la colada junto a las tumbas de sus seres queridos. Al llegar al cementerio se puede observar a las familias que se sientan en las tumbas para arreglarlas, un compartir un momento con sus seres queridos y recordarlos. Otras de las tradiciones que se han mantenido no solo de ir a compartir con sus seres queridos sino de celebrar junto a ellos una misa que en muchos lugares lo toman como un paso donde el alma pueda cristalizarse.

En la actualidad esta tradición se va perdiendo, ya que ven como una pérdida de tiempo, y las personas se han vuelto muy superficiales. Una de las causas de esto es que les dan más importancia al egocentrismo de las personas que al pensar que una persona al morir ya deja de existir, presencialmente, pero muchos por la pérdida de creencia religiosa ya no creen en la presencia religiosa que esta persona puede dejar. Otro de los factores se considera la influencia que tiene la sociedad ante las diferentes festividades extranjeras, y se lo toma como un fanatismo actual.

Un breve análisis de la película “El libro de la vida”, se ve reflejado la cultura mexica con el diverso colorido, folklore, las calaveras, símbolos representativos de ella. El día de los muertos, contiene un marco imaginario con sus distintas leyendas de aquí nace esta historia. Podemos reconocer en La Muerte y en Xibalba la fuerte presencia del imaginario cultural mexicano, dos seres míticos que a su vez son guardianes de la Tierra de los Recordados y la Tierra de los Olvidados.

La trama es simple, dos amigos de la infancia: Manolo, y Joaquín compiten por el amor de María .Ante esta situación La Muerte y Xibalba  realizan una apuesta para ver quien se gana el amor de la heroína, con el objetivo de quien sea el ganador se quedara con el Mictlan: el mundo de los muertos colorido y atrayente. A partir de la trama, surge una serie de referencias al México rural, que si bien no puede escapar del idealismo por ver a México como un país rural, las referencias son más arquetípicas que despectivas. Así pues, a través del relato que enseña historia en un museo a niños nos vamos adentrando a la historia de manera amena y si complicaciones.

La cinta crece cuando en la trama, parte de los protagonistas deben de lidiar con el mundo de los muertos en donde de manera mitológica y respetando ciertas creencias del México actual, nos vamos dando cuenta de los símbolos y la tradición oral y visual, que nuestro país a construido en torno a la festividad del día de muertos.

 La Muerte está representada como una clásica catrina, hecha de azúcar .También cumple con los elementos de la elegancia, el porte, su género, su dulzura. Por otro lado está Xibalba, este proveniente de la cultura maya y que representa el inframundo. Algo en particular a señalar es que la muerte es vista como parte de la existencia y un paso a otros niveles, no como castigo o un final sin retorno.

Lo más rescatable de la historia es el tratamiento que se le da al tema de la llamada “fiesta brava”. Esto resulta el desenvolvimiento de la historia en este sentido, nos dan una gran lección a través de las decisiones de estos.

Cada personaje está realizado con impresionantes detalles, cargados con elementos representativos, con significados profundos en su personalidad y de la cultura mexicana. Los demás personajes son un ejemplo de la atención al detalle, cada uno de ellos tiene un tratamiento visual muy interesante, incluso con mayor realización que la historia eje. Casi sobra decir que la transformación del personaje de Manolo cuando va a la Tierra de los Recordados es genial y ese mundo, un festín visual aún más grande.

Para un mejor desarrollo de este ensayo se visitó un cementerio en nuestro país el cual se localizaba en la provincia de Tungurahua, en el cantón pelileo, al realizar la visita puede observar la fluencia de la gente para ir a visitar a sus seres queridos, en aquel cementerio se podía observar las diferentes tradiciones de la gente unos arreglaban la tumba, mientras que otros se sentaban a compartir, con ellos.

La decoración en las tumbas en aquel lugar, lo hacían con cintas blancas y moradas, en la parte superior de sus tumbas mantenían las fotografías de las personas muertas. En una de ellas que más me llamo la atención fue era un nicho familiar en el cual la decoración de cada tumba era un pasaje de la biblia, en otros lugares las tumbas no eran más que un cruz pero alrededor del lugar sus familiares se sentaban alrededor de ella. En la mayoría de los nichos había muchos arreglos florales. En el medio del cementerio se observaba la celebración de misas cada hora, a la cual los familiares primero asistían a ella y luego se dirigían al lugar donde se encontraba enterado, otras familias al encontrarse cerca del lugar de la misa se sentaban a escucharla junto a las tumbas.


Si nos ponemos a analizar y comparar con esta película podremos ver que la cultura andina del Ecuador se asemeja mucho por las grandes influencias que hemos tenido de aquellos pueblos, mientras que en la cultura mexica se lo acoge más con más fervor, que en nuestro país. Aunque en la película se muestra las distintas alegorías de la cultura, tanto en sus personajes como en la decoración, pero al comparar con nuestras tradiciones nosotros podeos dejar a un lado las alegorías ya que las únicas que podemos asemejarse a ellas son los decorados de moños o cintas, morados, negros o blancos.

En los pueblos que estos mantienen las tradiciones son pueblos indígenas, que sus cementerios no son la riqueza con las que se puede ver en la película. Mientras que un factor importante que se observa es la tradición de compartir los alimentos con estos seres queridos que ya partieron a otro mundo, en los dos ambientes se ve mucho esto aunque en abundancia en algunos que otros.

 Otra observación que podemos ver es la creencia en un dios, en nuestra cultura se lo acoge mucho a la religión católica, cristiana, que se lo toma a un Dios = Jesús como una fuente de la creencia de esta tradición ya que en muchos lugares se hace la celebración de una misa por el alama de aquella persona. En la película en cambio se observa la creencia no en un solo dios, sino en varios como son la muerte, el guardián del mundo de los olvidados como el mundo de los recordados, y se asemeja mucho a su cultura por las diferentes alegorías, colores, y símbolos que los representa. 

También se observa que en uno de los escenarios se ve que al mundo de los muertos si así se lo puede decir, que se lo divide en dos de ellos, en el mundo de los olvidados y de los muertos. Mientras que en nuestra cultura, en un ámbito religioso podríamos decir que solo creemos en un lugar donde llegan todos, olvidados o recordados todos comparten el mismo lugar.

Como algo distintivo de las tumbas tanto en la película como en nuestro país se observa las decoraciones de las tumbas con monumentos de las personas muertas al ver en los cementerios de nuestro país se observa las fotografías de ellos, adornados con un sinfín de flores alrededor de ellos y cintas de colores.

Como conclusión podremos decir que hoy en día esta tradición de ir a visitar a sus seres se va perdiendo al pasar el tiempo. En algunas regiones o provincias del Ecuador aún se mantienen pero ya no en el grado que en generaciones antiguas lo hacían, más ahora solo se les hace un visita a ellos. Esta tradición es una costumbre mundial, por lo menos en los países con gran influencia de pueblos mayas o asteas, las cuales son las principales fuentes que se obtienen las diferentes leyendas, a las que nos aferramos. En la gente tenemos que conservar esta tradición ya que se va perdiendo por las diferentes festividades extranjeras más no nacionales. 

FOTOGRAFIAS CEMENTERIO DE PELILEO











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